
Los mercados están divididos entre las crecientes incertidumbres sobre la sostenibilidad del corredor de granos, el déficit hídrico en Europa/EE.UU. y la actividad internacional que sigue siendo mediocre.
Por Esteban Moscariello – Ejecutivo Comercial en DRC – Díaz Riganti Cereales
En resumen, la semana pasada comenzó sin un panorama alcista claro en el mercado de commodities agrícolas, pero sorprendentemente, se observaron subas significativas en los precios de los principales cultivos durante el jueves (15) y el viernes (16). La volatilidad provocada por las condiciones climáticas adversas y la pausa en el aumento de las tasas de interés por parte de la FED fueron los principales impulsores de estos cambios en el mercado agrícola.
El trigo de primavera en Chicago comenzó la semana al alza, mientras que el trigo de invierno mostraba una tendencia a la baja debido a un escenario productivo desfavorable. Sin embargo, entre el jueves (15) y el viernes (16), los precios del trigo aumentaron considerablemente, lo que resultó en un balance semanal positivo en general. La cosecha del trigo de invierno en Estados Unidos ha progresado, pero no se esperan mejoras productivas significativas debido al tiempo ya pasado. Además, el inicio del año comercial 2023/24 en Estados Unidos ha sido lento en términos de exportaciones. El trigo de primavera cerró el viernes en 258,4 usd/t en Chicago, una suba de 26,25 usd/t en la última semana.
Durante la semana, el contrato de maíz DIC23 en Chicago continuó experimentando una presión alcista significativa, aumentando un 32% entre mayo y junio. A pesar de la falta de fundamentos sólidos de oferta y demanda, el precio del maíz se mantuvo en alza, con preocupaciones sobre las condiciones climáticas y el aumento del área en estado de sequía en Estados Unidos. Brasil también comenzó a sentir la presión del maíz en el mercado. Esta semana el maíz cercano finalizó en 252 usd/t en Chicago, una suba de 14,17 usd/t respecto al viernes previo.
En cuanto a la soja, también mostró una tendencia alcista, recuperando parte de las pérdidas registradas anteriormente. Las condiciones climáticas desfavorables en Estados Unidos, con un aumento rápido del área de sequía, están brindando soporte a los precios de la soja. Sin embargo, la demanda de soja es débil y las ventas de exportación avanzan lentamente. Los precios de la soja y la harina de soja también cerraron la semana al alza. La soja contrato cercano finalizó el viernes (16) en Chicago en 539 usd/t en Chicago, una suba semanal de 29,4 usd/t. Mientras que la harina de soja cerró en Chicago en 413 usd/tonelada corta y subiendo 16,2 usd/tonelada corta, gracias a los impulsos del día viernes (16).
Preocupaciones por la demanda de soja estadounidense ante la actitud de China y ventas a Europa
A pesar de las condiciones climáticas favorables, la soja estadounidense no cuenta con fundamentos sólidos que respalden un impulso alcista en el mercado. Las ventas de exportación para la campaña 2023/24 avanzan lentamente, especialmente en relación con China, que solo está comprando al contado y evitando compromisos a largo plazo. Esta situación contrasta con la temporada pasada, donde Estados Unidos ya había vendido 13,1 millones de toneladas a China en comparación con los 3,1 millones de toneladas vendidas hasta ahora.
Esto refleja la actitud actual de China en su programa de compras de soja. Las ventas anticipadas deben acelerarse para cumplir con las estimaciones de exportación del USDA, pero actualmente se encuentran por debajo del ritmo necesario. Además, Estados Unidos continúa exportando soja a Europa a pesar de que la soja brasileña es considerablemente más barata. Esto podría estar relacionado con la exportación de aceite o diésel renovable producido a partir de la soja estadounidense procesada en otro lugar, lo que podría convertirse en una tendencia en el futuro. La demanda lateral y la competencia de Brasil plantean desafíos para la soja estadounidense en el mercado global.
Aumento de las existencias mundiales de soja plantea preocupaciones para el período 2023/24
Las existencias finales mundiales de soja para el período 2023/24 se estimaron en 123,3 millones de toneladas en junio, debido al aumento del remanente de la temporada anterior y a una reducción en la molienda en Argentina. A pesar de esto, se espera que el USDA realice ajustes adicionales en la estimación de producción de soja de Argentina, lo que podría impactar en cambios adicionales en las existencias iniciales y finales de la campaña 2023/24.
Brasil muestra un aumento significativo en las existencias finales esperadas, alcanzando un récord histórico de 40,79 millones de toneladas, un aumento de 7,2 millones de toneladas con respecto al año anterior. Argentina también experimenta una recomposición de las existencias finales, con un incremento de 6,4 millones de toneladas hasta alcanzar los 23,9 millones de toneladas.
La relación stock/consumo a nivel mundial se estima en un 31,9%, el segundo nivel más alto de los últimos 15 años, superado solo por la campaña 2018/19. El aumento de las existencias mundiales de soja plantea preocupaciones en el mercado global.